Mal partido y merecida derrota en Burgos truncando la buena racha y las sensaciones positivas de las últimas jornadas ligueras. Aunque era un envite de especial trascendencia para ambos, el Juventud sí puso toda la carne en el asador y estuvo mucho más intenso imponiéndose en prácticamente todos los duelos. El Tafa se mostró apático, con poca mordiente rehuyendo el cuerpo a cuerpo, y sin capacidad de finalizar con acierto las oportunidades generadas. Una combinación de factores negativos que te inhabilitan para ganar en esta categoría. Un traspiés que deja más abierta la lucha por los puestos de play off y que debe servir de aviso.
El equipo salió mal desde el arranque aunque Puértolas tendría a bocajarro la primera clara para el Tafa. El Juventud avisaba desde el inicio con dos acciones de mucho peligro estrellando el balón en el palo. Xabi en una acción por banda y posteriormente Unai en un robo alto trataban de meternos en el choque. Puértolas no acertaba en franquicia en el segundo palo para culminar un servicio de Natxo, el más entonado ayer en Burgos.
La zaga sacaba bajo palos un disparo de los locales y en una contra liderada por Puértolas, Íñigo no acertaba en el remate. El último tramo del primer asalto iba a ser determinante en el devenir del choque. Un error en la salida de balón suponía el 1-0 superando el rival a Irujo con una vaselina, y poco después llegaba el 2-0 en un balón raso a la espalda de una defensa desubicada 2-0. El segundo gol pareció escocer y Natxo y Uge remataban por dos veces dentro del área sin fortuna.
En la reanudación el Juventud dio un paso atrás con una defensa más cerrada tirando de oficio con la idea de robar y salir con velocidad a la contra. El Tafa tuvo la posesión de la pelota pero sin inspiración para romper el entramado local y con poca fe en la remontada. Natxo caracoleaba en la frontal sin disparar con comodidad pero a la contra a punto estaba el Juventud de hacer el tercero. Una falta al borde del área ejecutada por Unai era repelida con la cara por el cancerbero y jugando de cuatro combinábamos bien pero sin la profundidad necesaria.
En el minuto 29 llegaba el 3-0 en una jugada que evidenció que ayer no era nuestra tarde. A falta de 10 minutos salíamos con Unai de portero jugador buscando un tanto que nos metiera de nuevo en el partido. Uge se topaba con el larguero y Puértolas la enviaba alto solo en el segundo palo. Íñigo en una bonita jugada atacando en superioridad nos acercaba 3-1, pero en el minuto siguiente en la única pérdida arriba los burgaleses lograban el 4-1 desde prácticamente su área con la portería desguarnecida. El meta sacaba un pie de mérito en un remate de Iñigo que esta vez sí, hacía el 4-2 enviando a la red una asociación certera en banda con Natxo. El Juventud solicitaba tiempo muerto con 02:35 por disputarse pero ya no tuvimos ni paciencia ni clarividencia para jugar con cierta pausa en esta parte final, después del esfuerzo realizado en la reanudación nadando a contracorriente.
En resumen derrota que nos debe servir para aprender y extraer varias lecturas. Es cierto que todos los días no se puede ganar ni estar bien, pero llega lo verdaderamente decisivo de la temporada y tenemos que darlo todo si queremos consolidar esa plaza del play off. El próximo Sábado nos visita en Tafalla el cuarto clasificado Ibarra, otro choque de altura ante un muy buen equipo que servirá para dilucidar en gran medida si nos complicamos el objetivo en la tres últimas jornadas.
Vulcanizados Ruiz Tafa: Irujo, Íñigo(2), Natxo, Puértolas y Uge – cinco inicial – Xabi, Unai, Aitor, Xantivi, Moreno, Goros y Oihan.
Marcador: 2-0; 3-0, 3-1, 4-1, 4-2.